Ya estamos en ese futuro que tenemos la capacidad de generar constantemente.
A disfrutar ahora la traza de sucesos que nos deja el falso presente.
Ya estamos en ese futuro que tenemos la capacidad de generar constantemente.
A disfrutar ahora la traza de sucesos que nos deja el falso presente.
Saber ubicar a partir de una serie de números cualquier suceso pasado o futuro, sin que guarde relación con el momento presente.
Examen parcial, segundo semestre de 2027:
Acabo de ver la fecha y estamos en el futuro.
Comienza hoy la tercera década del vigésimoprimer siglo del Anno Domini, que va a transmutar en material las anticipaciones del siglo veintiuno. En nuestras mentes. Pues el siglo ya ha tenido el tiempo necesario para haber precipitado al deleite de cada espectador.
El truco no fue modificar la bioquímica del cuerpo, sino extender la sensación de ralentización del tiempo a medida que envejecemos.
Sobre la pandemia del doble año 20 tampoco se dejó mucho escrito a papel y lápiz.
El apagón de enero de 2038 cegó el ciberespacio. No nos queda documentación sobre la generación digital.
La tercera oleada fue más fuerte. Hay quienes aún recuerdan la tos siendo niños. No hay forma de recuperar sus fotos de cuando niños.
Los errores en las copias de virus cuyo material genético está codificado en ARN son frecuentes. A menudo tienen importantes consecuencias para los humanos que lo hospedan.
No se había clasificado este tipo de proteína en la superficie de un virus. Solo cuando surgen nuevos brotes se despierta el interés colectivo. Aún no hemos aprendido de las epidemias del pasado.
¿Cuánto tiempo falta?
El futuro lo estamos construyendo ahora, por más que intentemos dejar de participar en él.
En nuestra sociedad está apareciendo una brecha (...) que separa a quienes están adquiriendo los conocimientos y habilidades necesarias para moverse en este mundo digital de los que no.
Cuando terminas asimilando que...
...comienzas a encontrar la realidad espeluznantemente atractiva.
Es asombroso, ya ni siquiera somos capaces de imaginar el futuro, el día después de esta eternidad.
El tiempo transcurrió sin que fueses capaz de apreciar del todo el esplendor de los sucesos.
Eres lo que recuerdas. Lo que haces. Lo que necesitas que vuelva a suceder.
El Sol es el mismo desde un punto de vista relativo. O tal vez no lo es.
Dormir y dormir y dormir. Sin ningunas ganas de querer despertar.
Dormir para siempre. Y despertar donde siempre has tenido que estar. Más allá. Más adelante. Donde siempre eras joven, sin tener el apuro de aprovechar compulsivamente cada minuto del tiempo.
Te diriges en fast-forward. Sueñas despacio. Pues la vida se hace con calma mientras cuentan los minutos.
Times are changing todo el tiempo.
Dulces sueños antes de que la realidad comience a atormentarte luego de regresar despierto.
Soñar despierto. A retazos. Sin ningunas ganas de dormir. Porque es una pérdida de tiempo enfrentar la realidad y a la vez conciliar el sueño.